Eduardo Barreiro empezó su profesión hace 30 años, sus inicios se construyeron en uno de los locales del edificio del Colegio Sagrados Corazones, localizados en las calles Bolívar Oe 2 – 48 y Guayaquil, en el Centro de la ciudad.
Hoy Eduardo tiene 70 años, con gusto recuerda los años de gloria de la fotografía en el país. Él menciona que fue una profesión cotizada en Quito.
Las cámaras fotográficas fueron una novedad, señala. Los padres de familia casi siempre fotografiaban a sus hijos en la época estudiantil y para las fiestas religiosas, como las primeras comuniones. Los matrimonios fueron los eventos más solicitados en la profesión. Desde ese tiempo hasta la actualidad la profesión ha ido flaqueando, hoy, dice Eduardo, esta actividad casi no da para vivir. En su local, en la actualidad, vende repuestos y accesorios de cámaras fotográficas. Su local incluye dos cabinas telefónicas y cosas de bazar. El sistema digital revolucionó la fotografía, Eduardo trata de actualizarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario